La fibrosis pulmonar produce diversas cicatrices en el tejido que rodea las bolsas de aire llamados alvéolos en los pulmones, por lo que el paso de oxígeno se ve dificultado, uno de los motivos principales para que se produzca este daño es la exposición por largo tiempo a toxinas, trastornos médicos, radioterapia y algunos medicamentos.

Este daño pulmonar también puede ser provocado por otras afecciones como dermatomiositis, polimiositis, enfermedad mixta del tejido conjuntivo, artitritis reumatoide, lupus, esclerodermia y neumonía.

Las sustancias que pueden causar la fibrosis pulmonar son muchas, por lo que no se puede identificar una individualizada, así que se le llama fibrosos pulmonar idiopática. Igualmente la fibrosis pulmonar cuenta con una carga genética importante por lo que la herencia puede ser un factor importante.

Dentro de los principales factores de riesgo para ser propenso a la fibrosis pulmonar se encuentran la edad (ser adulto mayor), sexo (ya que esta enfermedad la poseen con mayor frecuencia los hombres que las mujeres). Igualmente las ocupaciones, tratamientos oncológicos y la  herencia.

Las complicaciones más comunes suelen ser aquellas en las que la presión arterial alta en los pulmones repercute en las arterias del sistema, algunas formas de hipertensión pulmonar pueden ser graves ya que van avanzando paulatinamente hasta la ocasionar la muerte. Otras complicaciones pueden ser insuficiencia cardiaca, cáncer de pulmón, coágulos sanguíneos, colapso pulmonar u otro tipo de infecciones.